
El Cuerpo se encuentra citado a las 20:30 hrs. con uniforme de trabajo en el Cuartel General.
De parte de toda la gente que hacemos este blog te enviamos toda nuestra fuerza amigo Richard.
Hola, siguiendo con las historias, aqui les va una que tengo hace un tiempo, creo que la encontre escrita en un fotolog. En realidad no lo recuerdo bien. ahí va.
"AMIGO DEL ALMA
Te has preguntado lo que sienten? Has visto sus rostros cansados pero ellos siguen adelante.
Muchas veces he visto en su rostro el miedo pero a medida que pasan los años ese miedo se transforma en seguridad.
Te has preguntado lo que se siente salvar una vida, y saber que esa persona podrá dejar su descendencia aquí en la tierra por que un grupo de hombres que no lo conocían salieron en sus gigantes caballos de metal en medio de la noche y abriéndose paso entre la muerte y el peligro dieron todo para que hoy se pueda sentar en la mesa con sus seres amados, y que ese hombre le agradece a dios cada vez que vea un bombero por el resto de su vida, por que en el momento que se estaba muriendo, no vio una luz sino que vio el reflejo de los cascos y sintió las manos de extraños que lo jalaban a la vida, que le decían … tranquilito ya te sacaremos, fuerza amigo, hoy no es el momento.
Tu piensas que sienten cuando a una familia con hijitos pequeños se les quema su casa, déjame decirte que sufren, muchos no lo demuestran por no parecer que sea eso una debilidad, pero el brillo en sus ojos lo dice todo.
Cuando mas de alguno ha estado a las puertas de la muerte tirado en una calle y solo llegan ellos, son los que están contigo todo el tiempo, y estarán hasta que un policia cubra tu rostro con la vieja lona azul que indica que todo se termino.
Te has preguntado que sienten al ver que los niños los miran como héroes y se emocionan cuando los abrazan con sus cortos bracitos y con vocecitas dulces les dicen…tio bombero, gracias por ser bombero.
Te has preguntado el cansancio que sienten, cuando han salido a un incendio y han estado cuatro horas con el hacha y las escaleras ventilando una industria y después de llegar al cuartel a eso de las 06: AM se quedan en pie para irse al trabajo.
Te has puesto a pensar en los que ya no están, en los que miran desde lo alto, el orgullo que sintieron cuando se dieron cuenta que fueron protagonistas de esta historia llamada vida, que hicieron algo y que no se conformaron con solo mirar como otro sufre.
Que crees tú que sienten al subir al viejo carro, y al llegar bajarse llenos de orgullo y valor con hacha en mano abriéndose paso entre las llamas para abrir paso a sus camaradas de lanzas como un gran equipo.
Te has preguntado que sienten cuando han estado horas con el autónomo puesto, cuando ya el casco se hace muy grande y muy pesado, cuando ya la transpiración de los cuerpos comienza a enfriarse, mas el agua te dejo empapado, y luego comienza el temblor en los dientes de frió, pero no lo veras triste lo veras feliz por que como un majestuoso cóndor el es libre y su alma esta en paz con dios y con el mundo, porque el cree en la amistad y en la hermandad, porque sabe que si el cae muchos caerán con el, que nunca lo dejaran atrás, por que aprendió lo que era el honor.
Te has preguntado lo que sienten cuando dejan a sus esposas para ir en socorro de otros, a muchos de ellos esto les ha costado sus matrimonios, lamentablemente el corazón de un bombero solo le pertenece a el, y nunca nadie podrá entenderlo, y explicarlo seria perder el tiempo, solo es algo con lo que se nace y se aprende a convivir.
Te has preguntado lo que sienten los bomberos por ti? Te lo diré ellos te aman mucho y es por eso que hacen lo que hacen, siempre que necesites ayuda, su brazo fuerte estará para ti, ellos estarán siempre, con el paso del tiempo a muchos se les apagara su luz pero vendrán otros mas jóvenes, y así hasta el fin de los tiempos.
Cuando estés en peligro habrá un puñado de hombres que darán todo por ti
Ese puñado de valientes hombres se hacen llamar BOMBEROS."
Esta historia comenzó el día 11 de septiembre del año 2005. Ese día fue particularmente "especial"; fuimos despachados al incendio del anexo cárcel Capuchinos. Concurrí en la M-7 a ese incendio, después de un extenuante trabajo -al que posteriormente también llegó el Q-7, regresamos al cuartel a eso de las 03:30 hrs. del día 12.
Me disponía a dormir, cuando el Tte. 3ro de esa época, Sr. Francisco Rojas, nos indica que nuevamente el Q tendría que salir a remoción de escombros a dicho incendio. Con mucha molestia recuerdo haberle dicho que no quería ir, que me encontraba muy cansado, puesto que la M-7 fue la última en llegar al Cuartel. Estábamos en eso cuando caen los timbres nuevamente.
Nos despachaban a Artemio Gutiérrez esquina de Ñuble. Donde nos encontraríamos con la 17 y la 13 creo, no lo recuerdo bien. Mientras nos dirigíamos al 10-0 al que nos habían solicitado, nos percatamos que la Q-7 llegó como primera máquina, dada lo distancia de las compañías que nos acompañaban con respecto al lugar. Yo recuerdo que en la cola del carro iba: Santiago Carrasco (Vol. Honorario), David Bravo, Ronald Labarca, y quien suscribe; obviamente iba más personal, ruego disculpas por no recordar en estos minutos quiénes eran.
Santiago Carrasco como Voluntario más antiguo de la cola del carro, dio instrucciones mientras íbamos en camino. Mi función era entrar al lugar con el manguerín, puesto que por la hora y el sector, era casi seguro que existía fuego. El teniente nos advierte por interfonía que, en efecto, había fuego en el lugar.
Al llegar, me baje rápidamente de la máquina a tomar mi posición, y en cuestión de milésimas de segundos, me encuentro con una mujer frente a frente que con su rostro casi desfigurado me dice que ALMENDRA estaba dentro. Olvidé la orden de mi Voluntario Carrasco, y corrí al interior de la casa. En el interior de una pieza encontré una mujer con un bebé en sus brazos, los tomé, y los saqué del lugar. En la puerta de la casa siniestrada los entregué a uno de mis compañeros, tampoco recuerdo quién fue.
En ese minuto me informan que más al interior estaba la pequeña Almendra. Me devolví, busqué en la pieza donde estaban ellos, y no había nada. Vi una puerta, la pateé con todas mis fuerzas y una gran llamarada me envolvió. Tristemente me di cuenta que ya nada podía hacer por mi pequeña Almendra.
No tuve nunca el placer de conocerla, pero cuando me di cuenta que ya más nada podía hacer, lloré como hombre que soy, lloré de impotencia de no haber cumplido con lo que juré. No me dolían mis quemaduras de manos y mi cara, me dolía el alma, me sentí y me siento hasta el día de hoy, frustrado.
Luego de eso me llevaron a la R-7 en donde me atendió el Inspector del Dpto. Medico, el Sr. Zubicueta y su ayudante, un voluntario de la Tercera.
Las quemaduras sanaron, pero aun no logro sanar el dolor que aún permanece en mí por no haber podido ayudar a MI PEQUEÑA ALMENDRA.
Anónimo
Voluntario
7ª Compañía Honor y Patria
Cuerpo de Bomberos de Santiago